Las tres Heridas

domingo, 24 de enero de 2010

ENCENDIDA


Si un día vienes encendida de invierno,
y llegas para quedarte a mi vera,
renunciaré al vástago dejado tierno
en la aldea donde ríen las calaveras,


date prisa que nos mira el averno
y un asta se lame en la tarde su cera,
se descuelga un presagio sempiterno
como nieve negando nuestra cordillera,


de un tiempo que se nos va desganado,
de hallar a lo limítrofe enterrado,
somos lo tenue en el color nacido


de un almanaque roto y envejecido,
que nuestro amor anhela esclavizado,
junto al reloj de lo humanamente defendido
una pasión cautelar de enamorado.










6 comentarios:

  1. Qué facilidad para atrapar palabras y moldearlas a tu antojo.
    Siempre es un placer y un lujo leer estos poemas.
    Gracias Luís.
    Besos.

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  2. Querido amigo:
    Tu lenguaje -como siempre- es exquisito, delicado, ambrosía para el profano... Es una delicia para mi anhelante paladar, degustar tus palabras.
    Un abrazo, y un beso poeta.

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  3. Menos dolor y angustia..., menos pena y desconsuelo y, mucho más amor, bienenstar, tranquilidad y esperanza en éstas letras.

    Precioso el poema, amigo Luis.


    Un abrazo, maestro.

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  4. Gracias Taty por tus palabras de aliento, quiero que sepas que tras los cristales y envuelta en azogue duerme mi ángel benefactor.

    Un beso para ti, y otro para Pablo y Matilde.

    Luis.

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  5. Yo no tumbo cañas,
    las tumba el viento,
    que las tumba mi amiga Lola con sus movimientos.

    Un beso y un cañaveral para ti.

    Luis.

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  6. Gracias María por tus palabras, y que el aire nos sea común desatando lirios.

    Un beso grande.

    Luis.

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